Conversando ayer con la Fran acerca del rol del profesor en el futuro, confirmé el hecho que los profesores ponen el centro de gravedad del valor que aportan, de su contribución, en la información que poseen, en el script del curso que dan, en los apuntes, en la materia en definitiva.
El drama es que todo eso ahora está en Internet y mejorado.
Y p'a peor, los alumnos, los chicos especialmente, son expertos en dar con ella en la red. Son expertos en hacer consultas en Google y usar herramientas como el rincón del vago para hacer sus tareas.
¡Como entonces, van los profesores a hacer las clases en el futuro?
Bueno, entendiendo que lo central de su rol es él mismo, en como es capaz de movilizar el aprendizaje de sus alumnos, como contagiarlos del entusiasmo y a veces pasión, que él siente por esas materias y el valor que significa manejarlas; como promover la participación en clases, la discusión y todo lo que sea necesario para que el aprendizaje de los alumnos se produzca.
Para ello, para tener buenos profesores del futuro, tendremos que preocuparnos mejor de su bienestar, de que estén bien remunerados, bien equipados, bien en lo personal, al día en los conocimientos, y una buena dosis de trabajo de desarrollo personal de todas maneras.
Los profesores no se atreven a postear en blogs sus materias pues temen que por ahí se filtre y se les vaya buena parte del valor que poseen.
El valor de un profesor está en su persona, y la materia estará, mas bien ya está, en la red.
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