Cuando pienso, actúo, converso, desde dónde lo hago ?
Dónde se sitúa mi atención ?
Al parecer, este punto desde donde opero, cambia. A veces estoy parapeteado en el centro de mi persona, de mi organización dirá uno. Adherido a mis tradicionales formas de ver y de pensar, sin aceptar nada que los vaya a amenazar. Como a la defensiva; o a la agresiva.
Cuando estoy parado ahí, todo debiera parecerse a lo que ya se, a aquello en lo que confío, a mis creencias, a como son las cosas.
Desde ahí, es poca mi capacidad de escucha, reducida mi capacidad de ver más allá, e incluso limitada mi capacidad de aprender.
Este punto desde donde opero, este punto desde donde atiendo, puede moverse desde ese centro, a los bordes de mi persona, a los bordes de mi organización, como sacando la cabeza fuera del auto en movimiento, para ver de verdad que hay allá afuera.
En esa posición puedo ver más allá, puedo ver incluso lo discordante, lo que no cuadra, lo que no se aviene con mis creencias, lo que no parece correcto, lo que no cumple con la regla. Y puedo tomar notas de ello y después analizar.
Esta es la posición del científico. El punto de la atención se ha desplazado desde el centro a la periferia. Prospera la racionalidad, los descubrimientos, la ciencia y la tecnología.
Ese punto de atención, puede ir más allá. Salir de la persona y situarse en el otro. Es la mirada empática. Desde esa posición del punto de atención, soy capaz de hacer preguntas indagatorias sinceras y aproximarme a ver el mundo desde la mirada del otro.
Esto requiere una cierta sensibilidad, requiere una apertura a nivel de corazón, no solo de mente, como en el caso anterior.
Cuando soy capaz de hacer este desplazamiento del punto de atención, una y otra vez, ocurre una transformación mayor. Dejo de verme aparte y empiezo a verme como parte del campo social en que me muevo.
Francisco Varela una vez dijo, que este fenómeno de la atención y sus desplazamientos, era un punto ciego de Occidente.
Y hay otro desplazamiento aún más allá, del punto de atención. En este nuevo caso, se produce una expansión del punto de atención y empieza a cubrir un campo mucho mayor. Parte por bajar por el cuerpo a sentir su inteligencia, o sentir la fuente dirán otros, del propio Ser.
Y al mismo tiempo todo el entorno del contexto mayor. Es como una perspectiva holográfica, de campo de la realidad, con centro en la fuente del propio Ser.
Estas, pienso, son palabras mayores. Puede que uno haya tenido estas experiencias y puede que no las haya sabido distinguir.
Pienso también que la meditación, el mindfulness, el yoga, son ejercicios que desarrollan para el lado de esta perspectiva de la atención.
Cuando Otto Scharmer nos mandó a entrevistar a personas del vecindario, muy distintas a mi, para indagar de quienes eran, como era su vida y como veían el mundo, nos estaba guiando en la perspectiva de avanzar hacia la capacidad tercera de la atención antes señalada. Y para mi fue potente.
He aprendido que como conversamos, depende de desde donde operamos en la atención. Y avanzar en calidad de conversaciones, significa avanzar en expandir nuestras capacidades de mover el punto de atención y con ello el potencial del Ser.
Hay personas que dicen que esto de lo que hemos estado hablando, la estructura de la atención, son los niveles de conciencia, un término que yo también suscribo, pero que no suelo usar mucho, porque las personas tienen grabado ese término de maneras que más pueden interferir que aportar a la apertura.
Qué dices a todo esto; te hace sentido ?
Fuente: Libro Teoría U de Otto Scharmer del MIT.
Muy importante Gabriel, reflexionar y practicar la atención. De hecho se observa que está en la base de las experiencias místicas, ya sea de tipo religiosas o espirituales en general. Hay varios textos que hacen referencia a la necesidad de desarrollar la atención para acceder a un mayor grado de conexión (para evitar hablar, como señalas, de niveles de conciencia).
ResponderBorrarParece ser que por una parte, puedo estar olvidado de mi (tomado por las imágenes como el sueño, semisueño o en la vigilia con ensueño) o poniendo atención con recuerdo de mi mismo (lo que produce un registro muy diferente de uno mismo y de la realidad).
Además es interesante como te refieres al lugar desde donde uno atiende. Creo que podríamos decir que si el interés está puesto en reforzar mis creencias (formadas en otra época), entonces registro que no hay atención. Que se trata de una mecanicidad donde estoy "tomado" por algo que ya no existe y que produce sufrimiento.
Esa mecanicidad se supera si puedo salir de mí y registrar al otro y a veces se puede llegar más allá si se produce conexión con aquello que está a antes y después de lo pequeño y de lo infinito.
Creo que estaremos de acuerdo en que para llegar al segundo y al tercer nivel de contacto, se requiere una enorme fuerza que sea capaz de producir este cambio.
¿De dónde se puede obtener esa fuerza?, ese es otro gran tema.
Un fuerte abrazo amigo y muchas gracias por tus aportes.