Libro Lo comido y lo bailado de Pablo Huneeus

Otro libro que leo de Pablo Huneeus. Este es una recopilación de artículos que escribió en su tiempo para la revista Ercilla. Un tiempo bajo el régimen militar de Augusto Pinochet.

Un tiempo muy especial, de mucho miedo, de pocas libertades, donde decir lo que se pensaba, no era fácil ni frecuente.
Pablo Huneeus lo hace, en su estilo coloquial, irónico, con su mirada de observador agudo, culto e inquieto, de profesión sociólogo, que de a ratos más parece periodista.

Hay artículos que se me quedan pegados en la retina. Nuevamente aparece en este libro un tema tratado por él en otros libros, el combate naval de Iquique. Se titula ¿Y Condell?
Se pregunta porqué todos los honores para Arturo Prat que perdió su batalla y no para Condell, que en el mismo evento, ganó su batalla, derrotando a la Independencia con su Covadonga de mucho menor calado. Logró encallarla y luego lograr su rendición a punta de cañonazos.
Elegir a Prat como el héroe de la jornada habla de nuestra particular idiosincrasia.
Más de alguno en el gobierno de esa época se puede haber molestado por este tipo de reflexión y arrojo de publicarlo.

Otro artículo que se me queda en la retina se titula “Deseducación pública”. Parte con la historia de un profesor de una escuela rural de Villa Alegre en las cercanías de Linares. Se mueve a su trabajo a dedo por la carretera, porque su sueldo no le alcanza para pagar locomoción y menos un auto. Me lo imagino uno de esos profesores abnegados que hay en Chile, que aman y siempre quisieron ser profesores. Es casado y tiene dos hijos, y apenas le alcanza para pagar el arriendo de unas piezas. Finalmente uno de sus frecuentes llevadores le ofrece trabajo en su criadero de pollos Broiler. Pasará a ganar el doble. Somos un país que le paga más a un cuidador de pollos Broiler que a un educador de nuestros hijos. Lo que sigue en ese artículo es devastador.

Otro artículo tremendo es el titulado “El expediente 44.233”. Es una profesora de la zona de los canales del sur, directora de la escuela pública de Pindapulli, del departamento de Ancud. Su marido muere el año 1974 y al año siguiente muere ella de cáncer. Son seis los hijos que quedan, la mayor de 20 años, que tiene que dejar su trabajo para ir a cuidar a sus hermanos. Es su hermana, con quien habla Pablo Huneeus, que a duras penas les permite sobrevivir. Y se sumerge en el papeleo que ya viene haciendo esta hermana para conseguir el montepío que les corresponde a estos niños. Encuentra su carpeta finalmente en Santiago y empieza sus devaneos de oficina en oficina, escuchando el habitual vuelva la próxima semana, vaya a .. Parece que Pablo lo logró, no queda tan claro, por que le hacen esperar nuevamente para el pago y se termina. Atroz. La burocracia chilena, que afecta a los más pobres.

Termino con el artículo “Vente a comer”. Esto está ambientado en el verano en ambiente de playa. Lo invitan a comer y dice que si, queriendo decir no. Lo típico.
Se debe duchar, afeitar, arreglar y partir. Al llegar, la música fuerte casi le impide oír a la dueña de casa que lo recibe. Hay mucha gente. Rápidamente le ofrecen un trago que al parecer no tiene ganas de tomar, pero igual toma. Se allega a alguien y empiezan a conversar a gritos: y tú qué haces; apenas se escuchan. Pasan a la mesa y la comida tampoco le apetece. Y después de la comida, lo que viene es el bailoteo, lo menos que él quisiera a esa hora de la noche. Finalmente, el mejor momento de la noche, es cuando logra acostarse en su cama.

Un libro que te transporta a otra época de Chile. Te ubica en cómo fueron las cosas en ese tiempo. Huneeus es un observador crítico, en un contexto no muy dado a las críticas, pero él lo logra.
No se si es un libro que recomendaría leer en estos días, pero que te ilustra bastante bien de una época, con la pluma fácil, irónica y a veces graciosa de Pablo.