Aprender cambió después de Internet. El alumno dejó o dejará de ser pasivo, receptivo, de las materias que un profesor le pasa.
El profesor será un facilitador de un proceso de aprendizaje, un provocador de ciertas conversaciones, un guía.
Y después nos interrogaban, controlaban, para ver si esos contenidos se habían instalado en nuestra memoria. Si sabíamos o no.
Hoy, partimos por enterarnos de los hechos, quizás de varias interpretaciones de porque sucedieron y sus consecuencias, y la pregunta será más bien del tipo ¿y a ti, que te pasa con lo que has escuchado de este hecho histórico?, ¿qué se te viene a la mente?, ¿qué ideas o sensaciones se te movilizan?
El proceso de aprendizaje pasa por la dinámica que se produce, por ejemplo, en grupos, cuando conversan acerca de temas, pero desde como estos pasan a través de la persona que cada uno es. Escuchar atentamente la voces de otros y ver el tipo de observador que uno es, en contraste con el de otros, desencadena incorporaciones, transformaciones, aprendizajes en definitiva, que producen que la persona salga de la experiencia distinta a como entró.
El profesor facilita y lidera la dinámica del proceso. Pero no lo controla.
La clásica disputa por quien tiene la razón debiera irse diluyendo. Más bien la pegunta es cual interpretación, cual visión, es más efectiva en la realidad y eso se verá más adelante.
El centro del proceso de aprendizaje es la persona, de otra manera que antes. Cada persona es diferente. Cada persona enfrenta el proceso de aprender de una manera distinta. Nadie tiene la razón.
Incluso, el proceso de aprendizaje lo gestionará el mismo alumno y no la institución donde el curso se imparte.
Solo me falta decir, que pienso que cada alumno tendrá un espacio en la red donde compartirá sus visiones, sus aprendizajes, de los temas que ha elegido aprender, y contribuirá con ello al aprendizaje de otros, construirá identidad pública para si mismo, lo que le permitirá conectarse en redes de aprendizaje permanentes y globales.
Eso pienso.
estoy totalmente de acuerdo, no debemos educar en lo que está bien y mal, si no en las consecuencias que tiene la elección o decisión tomada y acompañar esos procesos.
ResponderBorrarbesos, y como siempre, un placer leerte
Gracias Susoleto
BorrarQué interesante
ResponderBorrarNo te imaginas como me consume la nostalgia leerte y como me gustaría participar en el proceso de acompañar a los jovenes.
saludos
Buena opción Érika, acompañar a jóvenes que anden por donde uno ha andado.
BorrarMuchos cariños
Me engancha con eso que dice Ken Robinson de se aprende cuando el alumno se emociona.
ResponderBorrarY para emocionarse hay que meter el cuerpo entero en el proceso, estar motivado al final. Y lo que se aprende así, de verdad y no repitiendo como loro, queda grabado.
Ver entrada en el blog de la Comisión Redes Sociales del Proyecto País: http://redessocialesproyectopais.blogspot.com/2012/06/redes-sociales-y-aprendizaje.html
Flores decía que cuando metes las emociones pasas a niveles más altos de aprendizaje.
BorrarQue quede grabado, pasa, pero debe dejar de ser el asunto. No te parece?
Acuérdame enseñarte a poner links en los comentarios.
Saludos