Su autor, Pierre Franckh, es alemán, contemporáneo, actor y escritor, sin muchas certificaciones institucionales, así que parece ser un gran lector y autodidacta, de los que pienso irán apareciendo más y más en el futuro.
Basa su planteamiento en experimentos de laboratorio del ámbito de la física cuántica, de los que se concluye que desde nuestro cuerpo, con epicentro en el corazón, emerge un campo de energía cuántica, se podría decir, muy potente hasta 2,5 metros a nuestro alrededor, de largo alcance y de increíble velocidad.
La conclusión fundamental es que seriamos seres vibracionales en lo fundamental, conectados unos con otros a través de estas ondas tipo electro magnéticas.
Otro concepto que se deriva de todo esto, es que el átomo que siempre habíamos visto como constituido por materia, en la forma de protones, neutrones y electrones con masa, no son materia sino torbellinos de energía vibracional. Y de ahí se derivaría que nosotros somos energía vibracional.
Los experimentos son varios y contundentes, siendo uno el de la detección con fotones en un espacio vacío, del campo de energía, cuántica sería, alrededor de una molécula de ADN. Un campo que después de extraída la molécula de ADN perdura en su efecto. (Vladimir Poponin)
Otro tiene que ver con moléculas de ADN extraídas de la boca de un individuo y trasladadas a cientos de kilómetros de distancia; luego se somete al individuo a estímulos que afectan su estado emocional, ya sea con imágenes placenteras, como escenas macabras y se observa que esas moléculas de ADN reaccionan acorde, se expanden o contraen según el caso, y en el mismo exacto momento en que los cambios emocionales se están produciendo. (Jeffrey Thompson)
Estos son los dos experimentos que más me impresionaron; hay más.
Todo esto nos lleva a enfocarnos en como estamos vibrando, cosa que es determinada por nuestros pensamientos, nuestras convicciones y nuestras emociones. Y no podemos mentirnos, pues la vibración no miente y es acorde con lo que está en el fondo de nuestro ser.
Ahora, esa forma en que emitimos nuestro campo cuántico vibracional, produce un efecto, un impacto, potente en la realidad, en particular en las personas de nuestro entorno, incluso a distancia, y en los hechos incluso materiales. Es mucha energía puesta en movimiento, como para que no empecemos a recabar en ella.
Nuestro corazón gobierna a nuestra mente, dice el autor, lo que respalda con mediciones que dicen que el corazón es 60 veces más potente eléctricamente que el cerebro y 5.000 veces más potente magnéticamente.
Así que a sentir y atender a como estamos emitiendo desde el corazón.
Y para rematar, nuestras emisiones vibracionales, cuando resuenan con las emisiones de otros, producen efectos significativos y a veces potentes. Todo se trataría de con qué y cómo estamos resonando con otros; de ahí nuestras relaciones.
Si estamos atrayendo personas que en definitiva no nos aportan, es porque estamos resonando con ellas, con algo afín nuestro, que deberíamos empezar a trabajar si queremos buscar mejores resultados.
Mucho cuidado con como pensamos, especialmente si somos dados a la queja y a determinar lo que no queremos, pues al estar pensando en ello, será eso con lo que resonaremos y eso lo que atraeremos.
Esto me ha hecho pensar en el impacto que produce que las personas sean gobernadas por el deber ser, por lo correcto y no por lo que hay de verdad en su ser. Por de pronto, la emoción que acompaña a este tipo de posturas es muy distinta que la de las personas que se mueven desde la pasión, desde lo que es verdadero en ellos.
Buscar al verdadero ser que hay en ti, sacarlo del clóset, e insuflarlo de energía emocional, produciría los efectos vibracionales más potentes en el medio, tales que todas tus fantasías y deseos podrían con mucho mayor probabilidad convertirse en realidad.
Enamórate de tus deseos, acompáñate de frases de refuerzo, señala el autor, son medidas de alto impacto en tu vida. Por razones energético vibracional, de alto impacto en el mundo vibrante. Mucha relación con las ideas detrás de The Secret y los fenómenos de sincronicidad.
El campo que se abre con este planteo, es el de diseñar y construir campos vibracionales positivos y específicos, a conciencia.
Y lo curioso, es que potencia los deseos, algo que parece ser completamente antagónico al enfoque de "no deseos" del Budismo.
Referencias:
Mis notas sobre el libro
El libro
Aquí comparto mis impresiones y reflexiones sobre temas relacionados con el coaching profesional, que es mi actividad principal, libros que leo y otras menudencias, como una forma de compartir y propagar la conversación que estos temas generan
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Hola Gabriel, aún estoy gozando del clima y de la playa de Iquique, pero trabajando.
ResponderBorrarHay una secuencia muy bella, de la cual muchas veces no tomamos mayor conciencia, en referencia a lo que tu mencionas.
Lo que pensamos, después lo hablamos. Lo que hablamos lo transformamos en acción. Lo que actuamos, posteriormente se transforma en hábito y los hábitos construyen nuestro carácter.
Por lo anterior, mucho cuidado con lo que estemos pensando.
Gracias Gabriel, me haces actualizar estos pensamientos.
Un muy interesante complemento a la"Ley de la Resonancia" es el video resumen de la "Ciencia de los Milagros"en youtube de Gregg Braden.
Si, lo que pensamos más bien tenemos que tenerle cuidado, es una de las conclusiones. O más bien según que queremos lograr es qué pensamientos debemos promover y cuales evitar lo más posible.
BorrarEl link que puse en Vladimir Poponin más arriba, te lleva al video que señalas de Gregg Braden.
Saludos y gracias Dirk
Gracias por tu posteo Gabriel, muy interesante. Muchos hablan del positivismo, pero pocos han podido comprobar sus hipótesis científicamente. Me alegro que se estén derribando barreras típicas del occidentalismo que hablan de "lo interno" y "lo externo" o lo "subjetivo" y "objetivo" del ser humano. Ken Wilber, en su libro "Breve Historia de Todas las Cosas" escribe en forma magistral las etapas de la evolución de la conciencia que hace mucho sentido con lo que mencionas en la columna. Te recomiendo leerlo cuando puedas si aun no lo has hecho.
ResponderBorrarGracias Juan Pablo por el comentario. Efectivamente Ken Wilber es un autor obligado para los que resuenan con estos temas y el libro que señalas efectivamente lo leí.
BorrarSaludos
Gabriel, muchas gracias por el posteo.
ResponderBorrarAsombrosos descubrimientos los que planteas y su impacto en nuestra vida diaria, nuestra relación con nosotros mismos, con otros y con el universo. Poderosos acercamientos al gran MISTERIO que es el coaching.
Aprovecho de agradecer a tus generosos lectores y sus preciosas recomendaciones de lectura. Tengo el buffer lleno por un rato.
Saludos,
GRACIAS infinitas por compartir
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