Pero me interesó y le di dos pasadas al libro.
Me gustó la profundidad de la reflexión de Landerretche, a veces no fácil, para mi de captar en una primera pasada, ni quizás segunda.
Despliega en el libro parte de su historia personal, de exilio, estudios y gustos por la música, deportes, estudios universitarios, todos aspectos de la vida humana, que conectan a los hombres y mujeres entre si.
Dice en un momento, que Dios es básicamente el anhelo profundo humano de ser parte, de pertenecer a algo colectivo, comunitario. Me dejó pensado esta idea, que me parece interesante.
Los partidos socialistas y social cristianos comunitaristas, como me parece los llama él, todos buscan un acento en lo colectivo y comunitario.
El capitalismo, mata todo eso, exacerba lo individualista, desarrollista, tecnológico, creativo destructivo. Pero quizás lo más importante, es que mata el poder. El poder se diluye, si licua.
Muere, sin morir de verdad, pero queda escondido en los resquicios del poder económico, experto en malabares prestidigitadores, que les permite chupar, absorber más y más poder, económico, de riqueza, que al final de cuentas lo controla todo, transformándose en un titiritero de la política y los políticos.
Vivimos una era donde el capitalismo ganó todos los partidos y opera imparable, con su poder destructor creativo de todo. Nada dura, todo nace, prospera y muere.
Estamos en un mundo líquido, donde el fracaso de todas las opciones, socialistas o del color que sean, ha llevado a la aparición de opciones pre-capitalistas, fanáticas, como el islamismo, el fascismo, que como rocas, deberán posiblemente tener que sufrir confrontaciones incluso militares, pero lo esperable es que como rocas de la orilla del mar, sean también destruidos por esta mano destructiva creativa que todo lo absorbe.
Oscar Landerretche |
Landerretche, preocupado, solo ve la posibilidad de la generación de espuma en este océano que todo lo destruye "creativamente", en cuyas burbujas sobreviva lo colectivo y comunitarios, en pequeñas como islas, donde el humano encuentre el sentido perdido.
Y un tremendo llamado a los partidos políticos de su ámbito, de apretar filas y pensar y buscar, la verdad, una alternativa, pienso yo, de un capitalismo humanizado. colectivo, comunitario.
Un libro que recomiendo.
Para tener la otra cara de la moneda te recomiendo Camino de Servidumbre de Friedrich Hayek
ResponderBorrarPremio Nobel de Economía
La planificación como vía al totalitarismo. Una aproximación interesante, además uno de los libros más vendidos por Amazon en 2010...Resonancias?
BorrarInteresante punto para el debate...
Gracias Gabriel por traer este comentario. No he leído aún este libro de Landerretche pero lo que resumes está cerca de mi punto de vista de observador de la política. Nos tocan tiempos difíciles en los que generar comunidad es la catacumba moderna del pensamiento colectivo. En el vacío surge la necesidad de salvarse individualmente y para algunos el oasis del encuentro,
ResponderBorrarUna lectura recomendable en este momento.