sábado, noviembre 07, 2020

Libro Un verdor terrible de Benjamín Labatut

Venía recomendado, en nuestros almuerzos quincenales, por Osvaldo Schaerer; no podía dejar de leerlo.
Genios de las matemáticas y la ciencia, de principios del siglo XX, que cambiaron la historia, ganaron premios nobeles, que Labatut expone con un fuerte componente de la humanidad que eran, lo que lo hace de lo más entretenido.

Labatut
Nadie se salva de zonas oscuras y algunas muy oscuras.
El peor para mi gusto es Fritz Haber, un genio de la química, que logra sintetizar el salitre sintético, extrayendo el Nitrógeno del aire. Y nos cagó; el negocio chileno del salitre se fue a las pailas. Gran impacto. Fue la presión de la primera guerra mundial y el bloqueo naval de Alemania por Inglaterra, que impidió llegara el salitre por mar. Bueno, de esas dificultades los hombres, y las mujeres, salen adelante con inventos impensados.
Pero Haber aparte, inventó el pesticida Zyklon, que en su versión B, fue utilizado para exterminar a todos los soldados enemigos de las trincheras, junto a todo ser vivo, del tamaño que fuera, que fuera tocado por esta terrible neblina verde.
Su mujer, también doctorada en química, no soportó que Fritz organizara una fiesta para celebrar la matanza y se pegó un tiro.

Schrodinger
Aparecen matemáticos increíbles como Karl Schwarzschild, que desde las trincheras de la guerra del frente ruso de Alemania, le manda la solución exacta de las ecuaciones de la teoría de la relatividad general a Albert Einstein, que no era tan buen matemático como físico.

Otro matemático notable es el japones Shinichi Mochizuki, que desarrolló una teoría matemática nunca antes vista; aparte de resolver una de las conjeturas más importantes de la teoría de números, conocida como a + b = c
Un tipo rarísimo, aislado total, que no quería ni publicar sus inventos, salvo en su blog, ni hablar con nadie de sus temas.

Otro matemático es Alexander Grothendieck, hijo de un anarquista ucraniano y una revolucionaria, que terminan peleando en la guerra civil española por la república. Este niño crece más bien huérfano y resulta ser un verdadero portento. En la universidad, un profesor le pasó 14 grandes problemas matemáticos no resueltos, para que eligiera uno para resolverlo para su tesis de grado. Cuando volvió tres meses después, los había resuelto todos.

Heisenberg
La última mitad del libro trata de los científicos que lideraron el nacimiento de la física cuántica. En particular Werner Heisenberg y Erwin Schrodinger.
Cada uno de ellos un personaje, con altas dosis de desquicie, con historias muy sabrosas, en el caso de Heisenberg, en la isla Heligoland de Alemania, que es donde desarrollará las matrices que describirían el comportamiento del interior de los átomos. Y en el caso de Schrodinger, en un sanatorio para enfermos de tuberculosis, donde el efecto de una joven, hija del médico jefe, le activó la creatividad total, para inventar las ecuaciones de ondas que describían el comportamiento de los electrones en los átomos.
Y después, en Munich, el año 1926 (qué es el año en que nace mi padre), en que estos dos genios locos se enfrentan ásperamente.
Después se sabría qué ambas metodologías llegaban a los mismos resultados.

Un libro muy entretenido, especialmente si los temas de la ciencia y las matemáticas, y la vida de sus protagonistas, te interesa.

Yo me quedo cavilando con esta relación entre la matemática y la realidad de la naturaleza, que parece ser no falla en que las elaboración con ellas, dan en el clavo de cómo es la realidad misma.
Es muy bueno saber mucha matemática, parece.

1 comentario:

  1. Oh!!! Qué libro me has recomendado amigoooooo.. Notable estremecedor, bello. Lo estoy devorando. Muchas Gracias!!!!

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