Libro La sabiduría recobrada de Mónica Cavallé

La sabiduría recobrada de la doctora en filosofía española Mónica Cavallé, es un libro que logra atrapar mi atención hacia los orígenes mismos de la civilización en que nos encontramos y cuestionarla, desde sus orígenes mismos.
Toda civilización se asienta sobre cimientos filosóficos. Sobre respuestas a las preguntas acerca de quiénes somos y cuál es nuestro destino.

Nuestra civilización parte con Aristóteles, un espléndido elaborador de mapas teóricos, con su “principio de no contradicción”, que dice que es imposible que el mismo atributo se dé y no se de en el mismo sujeto.
Es el principio de la dualidad.
A continuación establece a la lógica, el pensamiento lógico-racional, como la principal herramienta de indagación en los objetos de la realidad.

Ello lleva a la filosofía a abandonar sus raíces de ser una indagación de uno mismo, de la propia transformación y la forma de alcanzar la sabiduría. Y se transforma en una especulación teórica de ideas en permanente disputa unas con otras, desconectadas de su objetivo terapéutico original.

En el tiempo de Aristóteles había otro gran filósofo, Herácito, al que llamaban el oscuro, simplemente porque no lo entendían.
Heráclito contradecía el principio de no contradicción de Aristóteles. No cree en la dualidad. Bueno y malo, refiere a la misma cosa, con distinta gradación, dice él.
Y señala que usar la lógica solo sirve para analizar las cosas simples de la vida, pero no las profundas. Para las profundas necesitamos sumergir el ser en ellas y dejar que este vea y conozca.
El conocimiento no se tiene, se es, termina diciendo.

La Filosofía es rescatada por Mónica Cavallé para ser una escuela de transformación personal, a través del conocimiento de uno mismo, en el mundo.
En la escuela de Heráclito, la atención se debe poner en escuchar la voz de la Fuente real que uno es. El sabio es el que se conoce a sí mismo.
Nos recomienda no identificarnos con las ideas de nuestros pensamientos, para no quedar atrapados en nuestra mente.
En ese mundo la realidad que vemos es simplemente el reflejo de nuestros pensamientos.

Existen tres yoes: el yo superficial que es el cuento que yo me cuento de quien soy; el yo particular, que es yo que los otros proyectan de mi y el Yo esencial, que es el centro de conciencia que somos, el que conoce.

Vivimos en un mundo atrapado por la mente lógico-racional, que ha creado la ciencia y la tecnología, todas muy buenas cosas, para inventar y descubrir todo aquello que nos ha sido tan útil.
Pero hemos perdido contacto con nuestra verdadera naturaleza, que ya en esos años de Herálcito, él había intuido.
Hay muchos otros pensadores que han entendido todo esto, que llaman filosofía perenne, y que son Ralph W. Emerson, Soren Kierkegaard, Friedrich Nietzsche, Simone Weil, Jiddu Krishnamurti, Albert Einstein, Maestro Eckhart, Lao Tze, Chuang Tzu.

Necesitamos ir más allá de la mente, ponerla a un lado, para escuchar al ser profundo nuestro, pues sólo ahí encontraremos todo lo que nos hace falta, el sentido, la paz y la felicidad.
Y entender que el conocimiento no se tiene, sino que se es. Y ello requiere desarrollar el ver, que es una capacidad, al parecer olvidada.
Un hombre puede hacer todo lo que quiera, pero no puede querer lo que quiera. ¿Qué es lo que quiere a través nuestro?

Termino con esta frase: la filosofía explica, la ciencia describe, la sabiduría nos transforma. Ella me hace ir a buscar a la filosofía más herramientas para mi trabajo de Coach.
Un libro mind blowing, que hace repensarlo todo. Te lo cuestiona todo. Te deja con ganas de seguir leyendo a esta autora, al menos.
Muy recomendable.