Libro Clarity de Daniel San Martín

Si, se trata de un modelo aclarador de toda la historia de la humanidad y la ciencia; sin duda. Es un libro para volver a él varias veces.
Me cambió la perspectiva de varias cosas que había aprendido de una cierta forma o que simplemente ignoraba, pues nunca había mirado en esa dirección.
Un libro de Daniel San Martín, imperdible. Lo recomiendo con fuerza.

El Big Bang genera unas pocas partículas elementales. Tres son las relevantes: los quarks para arriba, los quarks para abajo y los electrones. Danzan en el universo en expansión a altísimas temperaturas.
Va bajando la temperatura y estas tres partículas elementales se acomodan en dos átomos, el de hidrógeno y el de helio. Son ellos los que harán las estrellas, las galaxias, los conjuntos de galaxias.

Cuando una de estas estrellas de solo esos dos átomos explota en la forma de una supernova, en su colapso se producen todos los otros átomos más pesados que conforman nuestro planeta Tierra. Somos polvo de estrellas.
Ese material, producto de la atracción de gravedad, se aglomera en los que serán los planetas.
Estos átomos se aglomeran en moléculas, por la simple razón de que de esa forma son más estables. Moléculas de todo tipo van surgiendo, que se van entrelazando unas a otras.
Hasta que ocurre una particularidad, aparece una molécula que se puede replicar a sí misma; el ARN. Ello permitirá que pueda conservar la complejidad adquirida, sin perderla.

Sigue la complejización de estas moléculas hasta alcanzar el ADN. De ahí se agrupan colecciones de moléculas, que se protegen con una membrana de lípidos, apareciendo la célula y con ello la vida en la Tierra.
Bueno la historia sigue, surgen los seres vivos, los animales, los humanos y con las neuronas, aparece la conciencia. Me doy cuenta que soy yo, aquí, vivo, luchando por sobrevivir mientras vivo.
Surgen las comunidades, el lenguaje, las emociones, y el razonamiento.

Daniel San Martín sigue su relato basado en su modelo de siete características que ha medida que la complejidad aumenta siempre acotada o respetando el segundo principio de la termodinámica, lo que produce cada vez más basura o escombros.
Las comunidades se agrupan por las parejas cruzadas que van generando ancestros comunes. Surgen los ritos de recordación y los facilitadores de estos ritos, los chamanes y después los sacerdotes.
Y surgen las religiones y con ellas las identidades, que aglomeran a los que comparten un particular relato, que siempre es una abstracción, que por supuesto, creen es una verdad.

Siguen las guerras, las absorciones de civilizaciones, los imperios.
Aparece la estratificación de los grupos humanos, algo necesario para las guerras, pero estas perduran en tiempos de paz.
Aparece el Estado, los ejércitos profesionales y las naciones.
Las naciones se construyen conformando identidades parecidas a las conformadas por las religiones, que al final de cuentas las desplazan; a las religiones.

Y aparece el comercio, el dinero, y la confianza en el valor de ese dinero y el comercio global.
Y llegamos a la humanidad. Una humanidad que abarca todo el planeta y empieza a sentir que la expansión llegó a su límite.
Y como la segunda ley de la termodinámica obliga a que mientras más complejidad, que todo este avance conlleva, más entropía en el entorno. Y en ese proceso venimos deteriorando no sólo la ecología sino también el clima y la estabilidad planetaria y con ello nuestra supervivencia.

Qué nos salvará y eventualmente permitirá que la complejización continúe su rumbo, parece ser será la inteligencia artificial.
Y Daniel San Martín especula que podríamos prolongar enormemente nuestras vidas, eliminar el sufrimiento humano, sino que también el de los animales y producir sin fricción lo que queramos.
Un mundo futuro para soñar del que tira algunas reflexiones, que te dejan cavilando, que esto sigue, sin parar.

Me entero en este libro que China en la vecindad del viaje de Cristóbal Colón, que hace ese viaje a América, donde vive más gente que en Europa, en tres veleros siendo el mayor de ellos de 37 mts de largo. Bueno China tenía en ese tiempo una flota de más de 150 barcos, donde más de la mitad tenían largos sobre los 100 mts.
China en ese tiempo la llevaba, por lejos. Fue el emperador quien deshizo esa flota y esas iniciativas turísticas en que la usaban y decidió que su país se cerrara y no se conectara más con los pueblos bárbaros que había más allá de sus costas.
Miedo al tráfico de armas y al enriquecimiento de los comerciantes.

Bueno, fueron los comerciantes los que destronaron a los reyes en Europa y cambiaron el mundo con las Ilustración. Una Europa que no era nada hasta que los turcos tomaron Constantinopla y eso permitió el auge de los países en la boca del Rhin y de Inglaterra.
Mucha historia relatada aclarando o reinterpretando movimientos y desplazamientos humanos.

Fascinante y aclarador.