Hoy almorcé con mi amigo Gerardo. Que hace que un eximio gerente se tome dos meses de vacaciones y se vaya a China a vivir en una familia de chinos y se inscriba en una universidad en Pekin (Beiging) y asista a clases dos meses para terminar manejando el idioma chino razonablemente bien.
Conversamos animadamente en ese nuevo Ciros que está a la vuelta del antiguo Ciros de esta nuestra ciudad de Santiago, donde se comen tan buenos sandwiches de pierna en marraqueta.
Los chinos son un pueblo mas antiguo que nuestra cultura occidental.
Nuestra cultura, que nace en las piramides de Egipto, de ahi se mueve a Grecia, pasando por Jerusalem, luego Roma, Paris, Londrés, de ahi a Estados Unidos y finalmente a través de toda nuestra America latina.
Los chinos no están ni ahi con esa cosmovisión; son completamente otro cuento, que cuando vamos y los visitamos así como lo hizo Gerardo, nos cambia la cosmovisión a una mas amplia, que incluye a China, Japón, India y toda Asia.
Los chinos siguen a Buda, que no predica el bien en contraposición del mal, sino mas bien la conducta que da resultado, que mejor funciona para lo que sea que se desea. Por ejemplo, que es lo que mejor funciona para la guerra, para los negocios, para la vida ciudadana, etc. Los chinos se esfuerzan con dedicación a hacer bien lo que sea que les toca hacer, por que no se si siquiera pueden elegir mucho lo que terminan haciendo.
Tienen una dimensión espiritual muy arraigada que abarca toda sus vidas y que tiene mas que ver con como lograr ciertos estados internos de paz y plenitud.
Gerardo se sorprende con lo avanzado del país; la modernidad inunda todos los espacios. Espacios llenos de gente, de muchedumbres que van y vienen. Dice que hace 20 años que entraron en la modernidad y son definitivamente un pueblo desarrollado.
Tienen una cosa comunitaria mas fuerte que el individualismo nuestro. Obedecen a la autoridad, pudiendo ser esta el padre por ejemplo, asumiendo que ella sabe mejor que uno que es lo mas conveniente en cada caso. Obedecen a sus padres si estos llegan a objetar una relación de pareja; el sabe mas, asumen.
El idioma chino tiene innumerables signos que los obliga a desarrollar una capcidad de memorizar que a nosotros los occidentales nos asombra.
Regatean, que es una institución en el comercio; hay que estar preparado a bajar los precios hasta a una décima parte del valor publicado. Eso si, son mucho mas baratos que nosotros, desde la mitad de precio a un décimo.
Gerardo se llenó de contactos en China y en el resto del mundo con gente que hizo su mismo circuito y fueron compañeros en esa universidad. Que mundos se abrirán a medida que mas y mas personas se desplazan a China a estas incursiones que nos traen nuevos mundos de insospechados horizontes.
Bravo por esa audacia y por traernos rezabios de otros mundos que nos pueden trastocar el mate.
Aquí comparto mis impresiones y reflexiones sobre temas relacionados con el coaching profesional, que es mi actividad principal, libros que leo y otras menudencias, como una forma de compartir y propagar la conversación que estos temas generan
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Impresionante la experiencia, ciertamente requiere valor, el tipo de valor que requerimos para aumentar el valor de nuestras organizaciones.
ResponderBorrarSería interesante que tu amigo Gerardo cree su blog y difunda esa y otras experiencias que sin duda tiene. Puede estimular a otros a que acumulen valor para hacer lo que quieren hacer con su vida