En la fase anterior terminaron de crearse las naciones democráticas de la era industrial, donde surgen las corporaciones y en la última etapa la emergencia de los derechos humanos y el empoderamiento poco a poco del ciudadano.
El hombre fue educado y luego moldeado por los medios, para ser una persona que se amoldara a la línea de producción y a la empresa jerárquica. Un hombre más bien dócil, pasivo, obediente, trabajador, gobernado por los hay que, por como se hacen las cosas según algún mandato superior.
La sospecha es que el hombre de la nueva era será de otra forma. Y tendremos que acomodar todo el sistema educacional a ello.
¿Cómo será esta nueva persona?
Será una persona empoderada, relacionada, conectada en red, activa y autónoma, colaborativa, apasionada, creativa, intuitiva, contenta, sensible.
Esta intuición, pienso, tiene al coaching en el centro de la moda, pues sabemos que el hombre o mujer que hoy tenemos, no es el estereotipo que empezamos a necesitar, sino que una nueva versión, un nuevo diseño; algo totalmente nuevo.
Y la empresa que surgirá con este tipo de personas, aún no la podemos siquiera imaginar; solo sabemos que no estará basada en la optimización de los procesos.
Se siente.
Yo tiendo a pensar que podemos persistir en la optimización de procesos, siempre que estos estén al servicio de los valores mas profundos de la cultura corporativa y no al revés. Buen tema de debate. gracias.
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