Este libro debería leerse después del libro Por qué fracasan los países de los mismos autores.
Es un recorrido histórico y planetario de historia de la humanidad, desde una perspectiva muy novedosa, al menos para mi.
El tema central es la economía y la política y el estrecho pasillo donde el éxito estable se instala.
El Estado, Daron Acemoglu y James Robinson, lo asemejan a un Leviatán, un monstruo marino que representa el caos y la destrucción, que está en dos pasajes de la Biblia (esto lo busque en chatGPT).
Ahora, este leviatán debe ser controlado con mucho cuidado por los ciudadanos, pues si no adquiere la cara de un verdadero endemoniado. Solo basta pensar en Hitler y tantos más.
El ideal es un leviatán encadenado. Encadenado por la gente, por las personas, por los ciudadanos, por las asambleas o los parlamentos.
La historia de la humanidad, mirado desde este prisma, es una infinidad de casos por lo qué se pasean Acemoglu y Robinson.
Entendí porque la revolución industrial partió en Inglaterra y no en otra parte. Factor relevante fueron un par de revoluciones previas, siendo la gloriosa de 1688 la última. Antes, gravitante había sido la peste negra, que deja a la nación diezmada y con escasez de mano de obra.
Y se produce el tira y afloja entre el Estado monárquico y el parlamento, fijando leyes protectoras de la propiedad privada y la propiedad intelectual (patentes), que fueron relevantes para que explotara la inventiva humana y en particular la creatividad destructiva, esa que pulveriza tecnologías anteriores que no son protegidas.
Daron |
Los conquistadores venían a expoliar el territorio, haciendo trabajar como esclavos a los indígenas locales.
Claro, con este método se enriquecieron ellos y a la madre patria España, pero ahí se quedaron estancados. Ninguna posibilidad de emprender, de innovar y menos de creatividad destructiva.
En cambio en EEUU no estaban esos pueblos originarios en cantidad suficiente para explotarlos y tuvieron que ellos mismos repartirse la tierra y ponerse a trabajar.
Después se organizaron en asambleas y demandaron a la autoridad lo que fueron necesitando, creándo este leviatán encadenado que le ha dado a EEUU la prosperidad que todos conocemos.
Otra cosa notable de la historia, es como se acoplan la religión y ciertos poderes mundanos. Aparece Mahoma en el año 570. A sus 40 años recibe la iluminación que empieza a transmitir en sus enseñanzas, que son transcritas posteriormente en el Corán, el libro sagrado del islam.
En Medina las tribus presentes lo instalan como juez y mediador y se va produiciendo una mixtura muy potente, que crea una religion que pasa a ser el aglutinante incomparable para impulsar el gran imperio que terminó siendo el islam.
Este es un caso de leviatán no encadenado, sino que despótico.
Los leviatanes despóticos prosperan por un tiempo y después se vienen abajo.
James |
Por esa razón los autores Daron Acemoglu y James Robinson no le hacen un buen pronóstico tanto a la Rusia actual, como a China.
En África está lleno de buenos ejemplos de leviatán despóticos, leviatanes inexistentes, como leviatanes de papel. Estos últimos crean burocracias llenas de ñoquis, o personas contratadas por razones políticas o parentales que no hacen nada, salvo transformar a estos organismos en verdaderos inoperantes.
Argentina y Colombia son descritos en el libro como leviatanes de papel, inoperantes.
El libro tiene mucho material histórico en que aprenderás mucho y una manera de mirar la historia y el éxito o fracaso de los países de otra manera.
El espacio en que los países logran la mezcla o equilibrio de poderes que abrirán todas las posibilidades, es un pasillo estrecho, en el cual hay que hacer lo posible por persistir. Y no es tan fácil.
Un libro que recomiendo enormemente.
Estupendos e interesantes autores Gabriel. Lo leeré.
ResponderBorrarGracias por la recomendación.