Jennifer Middleton es una psicóloga-oncóloga chilena que lleva años trabajando con enfermos terminales.
Conversa con sus enfermos en esa etapa de la vida en que ya no hay nada que guardar y donde se puede reflexionar abiertamente.
Este libro son breves reflexiones sobre temas diversos de la vida y las personas, que siempre es bueno tener a la mano y pensar en ellos.
La primera reflexión que atrapó mi atención fue una en que ve las conductas egoístas como actos de socorro, resultado de una dolorosa soledad de la que no se tiene conciencia.
Sería un mecanismo de protección. Para pensarlo no ?
Otra reflexión fue acerca del sentido que le damos a nuestra vida. Cuando tu vida tiene un por qué, todo es distinto.
Las razones de porqué hacemos todo lo que hacemos en estos tiempos, da la impresión que lo hacemos por razones de poco peso: tener más, lucirnos ante los demás, viajar, tener suficiente para la vejez.
No será que las causas por las que hoy vivimos se quedan cortas, en relación a aquellas que de verdad le darían sentido a nuestra vida ?
Dice Jennifer Middleton que en todos estos años que lleva trabajando con enfermos terminales, ha descubierto que los que viven entusiasmados y felices se enferman menos, o poco simplemente.
Despertar cada mañana y sentir que nos espera un día pleno de satisfacciones y disfrutes, es santo remedio para cualquier enfermedad.
Qué difícil es en nuestra cultura ser uno mismo. Nos entrenaron para comportarnos debidamente, haciendo y diciendo lo correcto. Por ello, acceder a quien de verdad somos, no resulta nada fácil.
Pero parece ser que es una tarea a la que tenemos que entrarle, antes de irnos de este mundo. Descubrir quién de verdad somos y qué queremos.
Amarse a sí mismo, parece no ser algo prioritario en la vida, según nuestra formación. Pero parece que cuanto amemos a otros o a otro, es función de cuánto nos amemos a nosotros mismos. Qué lio !
Si tienes solo dos monedas, con una compra pan y con la otra jacintos, dice un proverbio persa.
Distinguir entre ir tras la eficacia económica, versus la eficacia vital.
Un prisma desde el cual mirar nuestras vidas con detención.
Y así, reflexión tras reflexión. Un libro que perfectamente podría permanecer en nuestro velador, para tomarlo de vez en cuando.