lunes, diciembre 09, 2019

Libro El arco y la lira de Octavio Paz

En estos tiempos agitados que corren, sumergirse en Octavio Paz, es un respiro.
Quien iba a pensar que un libro sobre la sustancia de la poesía me iba a pescar al punto de leerlo dos veces.
Quedo maravillado de la profundidad y lucidez de la mirada, de este escritor mejicano, que alcanzó el premio nobel el año 1990.

La poesía surge del lenguaje, pero antes del ritmo y la imagen. La poesía tiene ritmo, que debe acoplarse con la respiración y las formas propias de la época y lugar, en cuanto a ritmo y formas.
La poesía, a través de imágenes, accede a "lo otro". Eso otro, es el mundo mágico, divino, donde habitan los arquetipos, lo atemporal, lo que nos constituye en lo más profundo.

Octavio Paz
La poesía, dice Octavio Paz, crea las culturas. Grecia sin la Iliada y la Odisea de Homero, no sería la misma.

Vivimos una época, donde la poesía prácticamente no existe. Por qué ? Por que nuestra visión de mundo, tecnológica, racionalista, materialista, ha lavado el mundo de todo aquello que no es medible. Ha pulverizado el mundo con el que la poesía nos pone en contacto. Lo invisible es sospechoso, al menos.
Perdimos a Dios en la pasada y por eso tanto cura, que cada día me convenzo más, no creen en Dios, solo lo usan para fines mundanos materialistas y de otro tipo.
El mundo perdió el alma.

Los sacudones actuales, que de a ratos parecen ser fundamentalmente materialistas; o por lo menos esas son las directrices de las decisiones de los gobiernos; pueden ser reflejo de un alma que quiere revivir.


Al abandonar la poesía e irnos al mundo exterior, a las materialidades, o los placeres epidérmicos de nuestra superficie, hemos abandonado la búsqueda del ser.
La poesía lo que nos dice es que la razón de ser del hombre, es ser. Ser todo el ser que somos.
Nada de esto se puede medir, está claro. Por eso tan puesto en último termino, tan olvidado, especialmente por los hombres.

Quisiera entender que los sacudones actuales de nuestra sociedad, se deben a que los jóvenes no ven nada atractivo en el mundo que les ofrecemos. E incluso, las mujeres, más conectadas con su interioridad, son protagonistas fuertes de las convulsiones actuales.
Necesitamos recuperar el foco en el desarrollo y búsqueda del ser que somos. Necesitamos humanizarnos, abrirnos al mundo de las cosas que no se pueden medir.

Quizás por eso tan pegado he estado el último tiempo al tema de la conciencia, que Harari dice será preocupación fundamental del siglo XXI, al nivel de cartografiarla completamente. Hoy ni siquiera sabemos el punto en que se encuentra nuestra conciencia minuto a minuto, como dice Francisco Varela.

Poesía, ser y recuperar el acceso a "lo otro", lo no material, lo no medible.

Referencias:
Conferencia sobre el libro
Conversando con Octavio Paz

1 comentario:

Los comentarios de este blog son moderados; eso significa que antes de ser publicados, serán vistos y aprobados por el autor de los posteos (anda mucho bandido por las redes).
Disculpa las molestias