lunes, agosto 17, 2020

Libro El nuevo orden social de Rudolf Steiner

Libro difícil de leer; solo en la segunda pasada empecé a ver sus luces. En la primera vi que la espiritualidad ocupaba un importante espacio, de una forma que me pareció nueva.

Está preocupado por el orden social de las naciones. Escribe buena parte del libro antes y después de la primera guerra mundial, siendo él alguien que se movió entre Austria, Alemania, Suiza y Croacia; por ello, en medio de esa conflagración.
En el último capítulo expresa sus puntos de vista de porque esta guerra se desencadenó.

Su planteamiento contempla tres pilares para una convivencia social sana.
El primer pilar es el económico, que se ocupa de producir las mercancías, moverlas y disponerlas para el consumo ciudadano.

Rudolf Steiner
Segundo, la parte legal legislativa, que se preocupa de las leyes y la relación de hombres con hombres y grupos.
Y tercero, la parte cultural-espiritual, que se ocupa del desarrollo de la persona, de las ideas y del desarrollo de la ciencia.

La intuición que surge en la revolución francesa, de aspirar a la fraternidad, igualdad y libertad, las distribuye Steiner, una en cada uno de los tres pilares anteriores.

La fraternidad debe reinar en la dimensión económica, la igualdad en la legal y la libertad en la espiritual.
Me hace mucho sentido.

Ahora, hay dos aspectos donde Rudorlf Steiner hace propuestas ya más radicales.
Uno es el tema de la propiedad privada, que la pulveriza en su acepción que conocemos y la asienta en el beneficio social para la comunidad toda.
Nadie puede heredar propiedad para el solo objeto de sacarle una renta sin hacer nada.
La propiedad se mueve hacia personas que puedan mantener el aporte de ellas a la comunidad, o aumentárselo. Quién decide estas transferencias es la instancia legal, de las leyes.

Y lo otro donde hace cambios radicales, es en el tema del salario, hoy sueldo.
Opina que las capacidades humanas no se pueden transar como meras mercancías. El ser humano es algo sagrado y sus capacidades deben atenderse, desarrollarse y cultivarse, bajo el alero del pilar cultural-espiritual, que tiene como una de sus tareas, la educación.
Tanto el contratante, como el contratado, confluyen en la producción de mercancías, cuyo retorno ha de repartirse en forma justa entre las partes.
La renta o sueldo, debe repartirse en forma proporcional al retorno que las mercancías vendidas aporten.

Lo que más me ha atrapado de este libro es el pilar espiritual, que mezcla con el cultural. Este pilar del sistema social se preocupa de la persona humana, de su desarrollo y cuidado, como si fuera de verdad algo sagrado. Por eso, no acepta el tratar al trabajo como mercancía.

Goetheanum, obra diseñada por Steiner en Suiza
En el pilar espiritual, se despliega la educación, incluso de los jueces que irán al pilar legar o del Estado a hacer las leyes y juzgarlas.
Además en este pilar se realiza la investigación científica, cuyos descubrimientos se pasan después al pilar económico para que los use en los procesos de producción de mercancías.

De cierta forma el pilar espiritual tiñe o impregna a los otros dos pilares, el económico como al del Estado y la confección y ejecución de las leyes, de ese espíritu que brota del interior del alma humana, sin el cual todo amenaza con corromperse.

No sé porque, pero presiento que estos temas, elaborados por Rudoflf Steiner antes del año 1919, justo después de la primera guerra mundial, hoy tienen algo que aportarnos.

Los que han leído a Steiner, tienen algo que decirme para precisar o complementar estas ideas ?

Seguiré leyendo a Steiner, eso está claro.

Referencias:
Conversando de Rudolf Steiner
El desafío de Rudolf Steiner

2 comentarios:

  1. Desde mi entendimiento de la lectura de este libro, su propuesta no sería repartir el retorno entre el contratante y el contratado como lo tu posteo. Yo entendería que ambos forman la comunidad productiva donde cada individuo se ubica desde su propio entendimiento y aceptación en el lugar en que su comprensión de contribución a la comunidad estime que puede contribuir de acuerdo a sus capacidades y a su propio destino o sentido de vida. Esto en un permanente diálogo con el espíritu que anima a la comunidad. Independientemente de la contribución que cada uno haga, todos los miembros tienen asegurado su sostenimiento. Solo desde el lugar en que en cada alma viva el espíritu de la comunidad y en la comunidad toda viva el alma individual. El ROI o beneficio que se genera, (después del sostenimiento de los involucrados y las previsiones de futuro) no es apropiable, sino que debiese ser destinado al desarrollo de la cultura a través de un acto de donación desinteresada: siendo la donación el acto económico más rentable posible, tanto en lo económico, como en lo social y en lo espiritual.

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    Respuestas
    1. Notable; es como otro mundo u otra galaxia. Un ideal a empezar a inhalar.
      Saludos y gracias

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