martes, abril 26, 2022

Libro Infocracia de Byung-Chul Han

La Infocracia sería lo que viene después de la democracia.
En la democracia, el individuo libre y autónomo, se expresa y delibera con otros, buscando resolver situaciones, optimizar procesos o decidir qué hacer aquí y allá.

En la infocracia, la información capturada a través de las pantallas que registran todo lo que hacemos, va a dar a grandes estanques de Big Data, donde con la ayuda de algoritmos e inteligencia artificial, se resuelven las mismas grandes preguntas, en forma robotizada. Y claramente, el algoritmo inteligente, supera todas las capacidades de procesar información de los humanos.

En la infocracia, los políticos, las constituciones, sobran. No hacen falta.
Cómo me voy de aquí para allá, ya tenemos claro que Waze lo resuelve mucho mejor que nosotros, pues incluso sabe cómo está el tráfico en ese momento. Los que siguen sin darle toda la autoridad a Waze para esas decisiones, están atrasados en modernizarse.

En el futuro, los algoritmos te dirán qué carrera estudiar, dónde ir de vacaciones, qué casa comprar o arrendar, incluso con quién casarte.
¿En qué nos transformaremos cuando todo eso ocurra? Tremenda pregunta.
Byung-Chul Han dice, que esta idea del yo, esta idea de ser libre y autónoma, quedará obsoleta y se borrará como una imagen en la arena cuando viene la ola.
La idea del yo que tienes de ti mismo, quedará obsoleta.

Hagamos un alto aquí. Encuentro que todo lo dicho hasta aquí, aunque parezca ciencia ficción, me parece macabro.
Es como un mundo en que las máquinas resuelven todos nuestros problemas y el gobierno, o los robots, establecen una renta suficiente universal, para todos, sin la necesidad de hacer nada. ¿Qué haríamos en ese caso?

Sigamos con Byung-Chul Han.
Pasamos del régimen de los soberanos, donde la dominación se ejercía desde la grandeza de la escenificación de un teatro enorme, donde el poder lucía superior a todos y los insignificantes humanos actuaban aterrorizando a los espectadores, en carnicerías grotescas. No podía sino quedarte claro quien era el poderoso y quien no. 
Después vino el régimen de la disciplina, de la era industrial, donde cada individuo era educado de manera de operar dócilmente en la parte de la gran maquinaria, donde se le requeriría. Tu cuerpo era fuente de energía motriz o analítica, para que la maquinaria siguiera funcionando.
Y hemos llegado al régimen de la información, donde la persona es liberada e instada a desarrollar su propio perfil identitario. Finalmente me experimento como libre, capaz de editarme a mi mismo y construir la persona que yo quiera. Es un mundo de la transparencia máxima y de la comunicación total. Lo que fluye, de ida y de vuelta a raudales, es la información.
La persona pasa a ser un generador de información, con el cual la caja negra algorítmica tras bambalinas, construye tu perfil y te provee de la información justa que solo tu quieres y te encanta consumir. Y por esa vía, te tienen total y completamente transformado en un borrego consumista.

La cosa se desmadra, cuando los poderes detrás de los algoritmos descubren que si te mandan fake news, pueden manipular tus opciones políticas a su antojo. La verdad se va al tacho, “el otro” va desapareciendo, el relato es reemplazado por la información y los datos. Y estamos hasta el yako.

No se, me da ganas de no recomendar este libro. Te dejará con crisis de pánico, sino estás fuertemente parado en algo que te de solvencia propia.
Un libro de este filósofo, que capaz esté vaticinando como viene la cosa y tenemos que conversar mucho para que esta debacle no se nos venga.

13 comentarios:

  1. Anónimo9:32 a.m.

    Alguna vez conversamos acerca de la tecnología de la información como un proceso democrátizador imparable , rápidamente se ha transformado en una plataforma para manipular y controlar poblaciones , Aunque duele lo que expresa este filósofo, coincido en la mirada crítica que plantea, agréguese los avances de neurociencia y estudios sobre el aprendizaje del cerebro , y, el panorama se vuelve aterrador, Estos temas requieren de pensadores capaces de observar y comprender cómo las tecnologías han cambiado la humanidad , cosa que suena fácil de decir , pero, casi imposible de llevar a la práctica, Un agrado leerte , Miguelangel Clerc

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    1. Muchas gracias Miguelangel por tu buen aporte a la conversación. Saludos

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    2. Concuerdo plenamente, de echo una vez desarrollamos con Gabriel una estrategia para potenciar el uso de las rrss para la democracia (para el Proyecto País del Colegio de Ingenieros), pero la fuerza económica de los algoritmos que nos mueven hacia nuestros sesgos, está llevando a la democracia por un camino muy destructivo. Los dueños de las plataformas buscan que las empresas aumenten sus ventas y les paguen por la gestión de nuestros sesgos, y algunos astutos lo llevaron a la gestión de propaganda política. Está lleno de casos ya decumentados (Brexit, elección de Trump, crisis de Cataluña, etc. etc. Buena parte del malestar y de los extremos que vemos aquí en Chile están alimentados por esa tendencia a que cada uno ve cada día más las cosas en las que cree de antemano, eliminando la capacidad diálogo). Me parece desarrollar y potenciar las regulaciones, como los intentos que hace Europa. Saludos, Guillermo

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  2. Anónimo4:59 p.m.

    Para mí es una mirada parcial. Sesgada por los aportes tecnologicos en que hemos estado viviendo. Son herramientas que han tenido un impacto en las prácticas diarias. Hoy es frecuente ver a las personas cogidas por su móvil.y considerando amigos a los nombres que tiene en el..y luego íntimamente reconocer que no son amigos en el sentido humano. Allí en el medio de los estados de ánimo y emociones dónde vivimos. Nuestro relacionar es de humanos con su historia, sus comprensiones y con su ser . Donde las herramientas computacionales no pueden "llegar"...La comunicación es más que la transmisión de datos. Se inicia en el escuchar, y más que el lenguaje es leer los cuerpos y sobre todo las expresiones faciales y posturas corporales...

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  3. Hola Gabriel...yo veo que son propuestas basadas en un enfoque basado en tecnologías. Que hoy tiene una popularidad por el enfoque individualista donde nos formamos. Desde una mirada más humana con nuestra historia , estados de ánimo y emocionalidad donde vivimos nuestro ser , estás propuestas son parciales. Si vivimos un ser social.basado en la.colaboracion y coordinación en cuerpos que viven profundas emociones que no vemos, y que se expresan en el cuerpo, la cara, las disposiciónes sociales , el ser en el "mundo"...

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  4. Hola querido Gabriel. Muchas gracias por tus permanentes comentarios. Sin duda vivimos tiempos impresionantes, con una profunda transformación colectiva e individual donde la luz y oscuridad se potencian. Tiempos de abrir los ojos y salir de la “matrix”. Para el que quiera y le resuene adjunto 2 videos con Emilio Carrillo, quien hoy es uno de los líderes inspiradores en el campo de la consciencia. Tiene muchísimos libros y conferencias para el que seguir su huella.Un gran abrazo. https://youtu.be/FoZ5leo_Ay0 https://youtu.be/6I4QIh_RyB0

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  5. Para no caer en la trampa, es imprescindible una educación que nos permita sobrevivir como humanos y no transformarnos en autómatas. El desafío es mayúsculo y apasionante.

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    1. Cierto! Educación! Pero no se ve por donde cuando el foco es educación sólo para desarrollar una profesión, para el éxito laboral, pero sin contenido humanista.

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    2. Cuando hablo de educación no me refiero a la educación profesional, voy mucho más allá, voy hacia una educación que nos habilite para pensar, reflexionar, analizar, sintetizar, evaluar, discernir ... en síntesis, para que no nos pasen gatos por liebres!

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  6. Impresionante y, coincido en tu mirada, macabro, lo que nos plantea. Me pregunto cómo lo pasará Byung-Chul Han en su proceso reflexivo. 😉

    Desde mi mirada, lo que nos podría permitirnos mantener a resguardo en el Ser, aquí y ahora, presentes y conscientes, y no perdernos en el ruido de de la informacion, es hacernos conscientes de nuestro permanente ejercicio de elección. Independientemente si al final seguimos o no al Waze para el camino ( habitualmente lo hago y agradezco), o cualquier otra recomendación como mencionas que podrán existir (viaje, comer, comprar, leer, pareja, etc.) es reconocer que siempre estamos "eligiendo", en cada segundo, si tomamos esa recomendación u otra. Ese ejercicio consciente de (1) parar y observar las opciones disponibles, reconociendo los sesgos o manipulaciones fuera de mi conocimiento que pudieran llegar a tener, (2) elegir la opción que quiero tomar (aquí me gusta la palabra en inglés, "choices"), y finalmente, (3) actuar según esa elección, es lo que puede evitar que nos perdamos. Y si, pucha que es difícil, y por em contrario, fácil y cómodo olvidarnos, pero posible y entrenable. Aquí las comunidades creo son claves.

    Gracias por el pulso constante y rítmico de tus posteos, y la invitación a compartir. Un regalazo.

    Ignacio

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  7. Anónimo1:34 p.m.

    Gracias Gabriel, estoy con el libro sobre la mesa (al menos son solo 82 páginas de lectura). Si este puede dejarnos sin dormir, te aseguro que "La era del capitalismo de la vigilancia" de Shoshana Zuboff puede causarnos insomnio por días. En cerca de 900 paginas presenta una data impactante en la misma línea que Han. La pregunta que me hago es cómo los gobiernos del mundo y las constituciones no han regulado un tema que en un par de generaciones puede ser irreversible ¿Podemos llamar progreso a lo que socava el derecho al libre albedrío?

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  8. Pareciera que la libertad de nuestro ser interior se va haciendo cada vez más preciada en un mundo donde las técnicas del mundo "exterior" para capturar nuestra consciencia son cada vez más eficientes y eficaces. Me recuerda las palabras de Naranjo que decía "Cuida el reino del corazón y todo el resto vendrá por añadidura..."

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