Konrad Ziller es un escritor chileno, aparte de ingeniero comercial con postgrado en España en Dirección y Administración de empresas, en el Esade. Tiene una vasta experiencia además en ciberseguridad, con cargos directivos en varias empresas, aparte de académico.
Esta novela trata de una mujer chilena obsesionada con Salvador Dalí. Sueña en una etapa de su vida con ser su amante, por lo que es sus fantasías compite con Gala, la esposa de Dalí.Estudia psicología, se dedica a la clínica y a la academia.
Se rodea de cuadros de Dalí tanto en su casa, en su consulta médica, como en su oficina en la universidad.
Viaja a España, a la ciudad natal de Dalí, Figueras, y donde vive muchos años, Cadaqués.
Es mucho menor que Dalí. En algún museo de Dalí, un hombre la sigue, la fotografía sin que ella se de cuenta y cuando la aborda, establecen una relación. De esa relación nacerá su hija Alexandra.
El se queda en España y ella, se vuelve a casa, a su vida, donde nace la que será su única hija, Alexandra.
Yo, que me he transformado en un afín a la inteligencia artificial y los recursos de Internet, cada vez que nombra un cuadro de Dalí, parto a chatGPT y luego a youtube a obtener información sobre él. Aprendo y mucho.
Incluso me vi un video de Figueras, del tipo walking tour, donde me di cuenta de lo preñada de la ciudad con Dalí; aparece su nombre por todos lados.
Loara, el personaje principal de la novela tiene idilios en muchos frentes. Uno entre sus clientes de terapia, otro entre sus alumnos y no faltaba más, el rector de la universidad, también la persigue.
La influencia de Dalí en esta psicóloga obsesionada, imagínate como el libro está plagado de imágenes oníricas, del subconsciente, con mucha conciencia de las vivencias internas de la autora, que se aborda siempre con mucha franqueza.
Se pasa tres noches del fin de semana en prisión, sola, con un notable despliegue de sus fantasías y sueños, aparte de la guadiana, muy típica.
Antoine, su alumno, aparece al final del libro violándose a su hija, o intentando hacerlo, y ella casi lo mata. Vuelve a prisión y a sus ensoñaciones dalinianas.
Madre e hija viajan a España a ver a su padre, justo después de que Iván la llama desde la cárcel, y le anticipa que se suicidará, cosa que hace de inmediato.
En España, todavía afectada por esta muerte, se siente mal, termina en un hospital y en los exámenes, le descubren leucemia.
Empieza el tratamiento allá y lo completa en Santiago, adonde su hija había viajado con anterioridad. Viaja justo después que el padre de su hija, que quería consolidar una relación con ella, muere en un accidente en auto, decapitándose.
Este libro es una locura de situaciones vividas por esta mujer, contagiada de la mirada del mundo de Dalí.
No paran de pasar cosas, aparte de una relación sexual con un pintor de Santiago, que es lo más intenso que jamás había leído.
Lo que más me pasó con este libro, es que conocí mucho a Dalí, a Gala y su obra.